Hablar de Djalma, es hablar de la rivalidad que existía (y quizás todavía exista) entre él y Mostovoi.
La genialidad del brasileño desquició en todos los partidos al ruso, que no sabía cómo frenar al 8 blanquiazul, que además se crecía ante el eterno rival.
Una de las imágenes grabadas a fuego en la retina de los deportivistas es la famosa colleja de Djalminha a Mostovoi. El del Celta intentó provocar al herculino haciéndole gestos de mono, y cuando estaba protestándole al árbitro, recibió una colleja que todavía no sabe de dónde llegó. Aunque se revolvió e intentó hacer algo que igualase lo que había pasado, fue incapaz. De hecho, acabó desquiciado y hasta escupiendo a Djalminha.
La colleja de Djalminha a Mostovoi
Para aquellos que no se acuerden o que sean tan jóvenes que por desgracia, no lo hayan vivido, este video les refrescará la memoria.
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A partir de ahí se forjó una rivalidad épica. «No me arrepiento. Fue tan bonita… ¡Cómo voy a arrepentirme!”. Así explicaba Djalminha su acción en una entrevista. «El partido estaba muy caliente. Ganar al Celta no era fácil y lo calentamos un poquito para cambiar el juego. Estábamos en nuestra casa y teníamos que ganar nosotros”.
Y es que esta «LENDA RCD» fue uno de esos futbolistas que dejaron su sello en A Coruña. Un genio, a veces incomprendido, que levantó de su butaca a todo el estadio en más de una ocasión. “Si no hay anarquía no hay fútbol y si no hay jugadores fuera de lo normal, el fútbol es aburrido”. Así era el 8, genio y figura.
¿Con qué jugada de Djalminha te levantaste de tu asiento para aplaudirle?